Esta semana, un amigo me ha comentado que cierto endocrino le había prohibido hacer deporte porque estaba “demasiado delgado”, y no quería que adelgazase más. Y se quedó tan ancho. Lo digo porque es un chico joven, perfectamente sano y cuyo peso está solo un poco por debajo de los “estándares”. A mi amigo le remití a un texto que escribí hace un par de años, y titulado precisamente: “¿Estoy demasiado delgado?”. (más…)